Corría el caluroso mes de julio del año 1966 cuando mi amada madre tuvo a bien parirme, yo, a día de hoy aún pienso que hizo una buena cosa. Ese fue mi comienzo y no me importa reconocer que me cuento entre aquellas personas que desean que mi fin esté aún muy muy lejano.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario